LAS NEURONAS CANTARINAS Y LOS BENEFICIOS DE LA MUSICOTERAPIA EN LAS PERSONAS CON ALZHEIMER

 

Un estudio revela que hay ciertas neuronas que se activan en nuestro cerebro únicamente con el canto, siendo esta una actividad que frena el deterioro neurológico

 

Por Guillermo Robles.

Estas neuronas se encuentran en la corteza auditiva, concretamente se ubican en la parte superior del lóbulo frontal y solo responden a la voz cantada. Un estudio publicado en la revista Current Biology, realizado por el Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT) en Estados Unidos, ha descubierto la particularidad de estas neuronas, pues no responden ni a la voz hablada ni a otros tipos de música como la instrumental, sino que responden exclusivamente al canto.

El efecto por el cual esto sucede aún se desconoce, sin embargo, el estudio sugiere que “las representaciones de la música se fraccionan en poblaciones neuronales distintas que responden selectivamente a diferentes tipos de música”. Este estudio, profundiza a nivel científico en el impacto que genera la música en el cerebro, afectando a partes muy específicas del cerebro.

La música, como secuencia de sonidos en el espacio y el tiempo, tiene la capacidad de orientarnos. El canto de melodías en grupo va ligada a la transmisión de emociones, tiene el potencial de aumentar la autoestima, el sentimiento de seguridad y la familiaridad.

En cuanto a los efectos que produce la música en las personas, ya se ha comprobado su impacto en las emociones, la reducción de estrés y el aumento de sensaciones positivas y del bienestar. Si bien no tiene la capacidad de restablecer o detener completamente el deterioro neurológico, las terapias o tratamientos que implican la música no conllevan efectos secundarios, a diferencia de los tratamientos farmacológicos.

Pero, ¿en qué afecta esto a las personas con Alzheimer? Las personas que sufren de Alzheimer se ven afectadas por un deterioro neurológico el cual causa problemas con la memoria, el pensamiento, las capacidades ejecutoras y el comportamiento. Esta enfermedad se desarrolla por lo general, lentamente y se agrava con el paso del tiempo, llegando a afectar en fases más avanzadas las actividades más cotidianas. Es por ello que para frenar y ralentizar este deterioro es importante su detección en una fase muy temprana y combatirla con ejercicios, actividades y terapias que estimulen a la mente del enfermo.

Uno de los aspectos más destacables de la práctica de la musicoterapia durante las sesiones de musicoterapia para personas con la enfermedad de Alzheimer serían los cambios en la atención y la orientación temporal, que resultan mejoradas tras las canciones de bienvenida, presentaciones y dinámicas motrices, todas ellas realizadas mediante el canto grupal y la psicomotricidad. De igual importancia el aspecto cognitivo, ya que incluso en la forma musical más sencilla, una simple melodía tarareada puede estimular reminiscencias, y con ellas la memoria autobiográfica y los diferentes estados emocionales, además de ejercitar el habla y el lenguaje. Un último pero no menos interesante aspecto que afecta es la capacidad de reforzar los valores de identidad, autoestima, pertenencia a iguales, e incluso, mantener las cualidades personales mediante la comunicación, la socialización y la interacción.

Podemos concluir resaltando que la utilización de la musicoterapia en personas que sufren la enfermedad de Alzheimer, les ayuda a mejorar o controlar los síntomas cognitivos y sobre todo la conducta y el estado de ánimo, como demuestran numerosas investigaciones que se llevan a cabo en la actualidad.